Conociendo a Raúl Jiménez, la persona detrás del “Lobo Mexicano”

Bitacora CDMX

REDACCIÓN

• Raúl Jiménez habló con el sitio oficial de Wolverhampton sobre el arranque de temporada, su descanso y su estadía en el club.
• El delantero mexicano confesó que cuando viaja a su país de vacaciones los fanáticos lo esperan en todos lados. “Cuando vamos al cine (en México), tenemos que entrar dos minutos antes de que empiece la película. Nos sentamos en un pequeño cuarto, esperando a que todos se sienten, sino es muy difícil. Terminando la película, hay gente afuera esperándome”.
• Después de una larga espera, los aficionados mexicanos podrán adquirir los jerseys del Wolverhampton Wanderers en tiendas Innovasport de México. 

Sobre el apoyo de la afición:

“Los fans de Wolves me hacen sentir como en casa, lo aprecio mucho. Cuando cantan mi canción me dan energía. Esta clase de futbol es buena para mí, es más fácil jugar en un equipo con compañeros como estos. Todos son fantásticos y esto apenas comienza”.

“Apenas comienza, llevamos un cuarto de temporada y tenemos mucho que mejorar. Sabemos que será difícil por la cantidad de partidos, pero estamos preparados para ello”.

Sobre su descanso en la fecha FIFA de octubre:

“Siempre estaré orgulloso de representar a mi país, pero agradezco el descanso. Aquí en Wolves, el entrenador me dio un pequeño descanso y creo que lo necesitaba”.

“En verano, la mayoría de mis compañeros tuvieron mes y medio de vacaciones y yo sólo tuve 12 días porque jugué la Copa de Oro (donde fue nombrado el mejor jugador del torneo). El descanso fue positivo para mí, me pude desconectar. Es muy difícil pero siempre quiero estar jugando”.

Sobre su llegada a los Wolves:

“Me habló Nuno. Me dijo que me quería en el equipo. Le gustaba mi estilo y le dije que tendría que ir y pelear por un lugar. Quería que fuera su centro delantero pero tendría que competir.”

“Tuve la oportunidad y la he aprovechado. Le he devuelto resultados al profe”.

¿Cómo decidió ser futbolista?

“Cuando tenía cuatro años, les dije a mis padres que quería ser futbolista. No tenía idea de la vida, pero ellos me dijeron que también tendría que estudiar”.

“Toda mi familia me ayudó. Mis padres trabajaban pero aún así me llevaban a los entrenamientos, mis abuelos y tíos siempre estuvieron ahí. Sin ellos, nada de esto habría sido posible”.

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